Aun siento tu aroma en mi cuerpo y en mi piel están grabadas las huellas de una noche de luna que se quedaran por siempre en mi.
Tu imagen me persigue, me persiguen los recuerdos de momentos que siguen vivos que no se circunscriben a tu alcoba que se repiten una y otra vez estremeciéndome.
En mis labios guardo tus besos, cierro mis ojos y te traigo aquí. A ti y a la inmensa sensación de tenerte dentro de mi.
Eres tan insoportablemente bello que mi cuerpo se resiste a dejar de pensarte, de recordarte y volver a desearte a cada instante se convierte en el estado más popular en mí.
Mis manos sienten el vacio que dejaron las tuyas y mi cuerpo espera bajo una luna nueva, el regresar al momento en que en tus brazos yo me perderé.
Tus caricias tocaron mi alma, cuando me entregue a ti perdí el sentido de la realidad y bajo este cielo aguardo por una estrella fugaz.
¿Como hacer para despojarme de las huellas de tus besos, como evitar el engrama que al cerrar los ojos me lleva hacia ti, como luchar con el deseo?, si este vuelve sin avisar.
¿Como ver amanecer?, si solo me queda esta noche, otra luna y las ganas de volverte a ver.