Tu durmiendo
y yo mirándote dormir.
No importa,
nunca sabrás como te mire,
las luces
llenaron de color la habitación,
La noche quedo atrás y con ella los besos.
Salí de la
cama y te bese con la mirada para no despertarte.
Me fui
caminando envuelta en cosquillas, recordando tus huellas en mi piel.
Tratando de
disimular los rastros de una noche llena de aventuras.
Rememorando
cada detalle de tu piel junto a la mía.
Aun sin
entender cómo o porque me deje vencer en tus brazos.
Es la vieja
historia donde dos extraños que se
conocen en una cama
a la que quizás nunca van a volver.
Los besos
que hoy forman parte del paisaje, me hacen ir a por más
Quisiera tocarte
y contarte lo que me diste esa noche en que te conocí,
Pero es
tarde otra vez y me tengo que ir.
De lo que
paso solo quedo una nota de adiós.